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Por Dr. Eric Madrid, doctor en medicina
La artritis es una afección que ha afectado a los seres humanos desde el inicio de los tiempos. Los síntomas generalmente comienzan a los 40 años y progresan a medida que se envejece. Antes del diseño de los fármacos modernos, las personas con artritis no siempre sufrían sin descanso del dolor, sino que algunos utilizaban las hierbas como medicamentos para reducir el dolor. Durante siglos, la gente ha recurrido a la cúrcuma y a la boswellia, dos suplementos de hierbas que pueden ser útiles según un estudio de 2018.
"Artritis" viene de la palabra griega arthron, que significa "articulación" y la palabra latina itis, que significa "inflamación". La artritis literalmente se traduce como "inflamación de la articulación". En general, hay dos tipos principales de artritis: osteoartritis (~ 95 %) y artritis reumatoide (~ 5 %). Este artículo se centrará en la osteoartritis, que es la forma más común.
La mayoría de los médicos recomiendan los NSAID (medicamentos antiinflamatorios no esteroideos) para la artritis. Estos medicamentos son el ibuprofeno (Motrin, Advil), naproxeno (Aleve, Naprosyn), diclofenaco, indometacina y celecoxib (Celebrex). Si bien son útiles a corto plazo, pero estos medicamentos aumentan el riesgo de enfermedades renales y de ataques al corazón cuando se toman a largo plazo.
El acetaminofeno (Tylenol, Paracetamol) también se utiliza. Sin embargo, cuando se toma durante periodos prolongados de tiempo, puede generar estrés adicional en el hígado y niveles más bajos de glutatión. Por esta razón, varios usuarios toman suplementos de NAC o N-acetil cisteína para ayudar a minimizar el estrés del hígado.
También se pueden recetar medicamentos esteroides y narcóticos para casos más severos.
Los suplementos con cúrcuma y boswellia se evaluaron en un estudio en enero de 2018, en 201 personas de edades comprendidas entre los 40 y los 70 años, todas ellas con síntomas de artritis relacionados con la rodilla. Durante el estudio, los participantes tomaron cúrcuma, cúrcuma y Boswellia o una pastilla de placebo (azúcar) de aspecto idéntico.
La cúrcuma, también conocida como el azafrán indio, es una raíz de la familia del jengibre, que a menudo se consume dadas sus propiedades antiinflamatorias, antioxidantes y otras propiedades saludables.
Se cree que la curcumina, la principal sustancia química que se encuentra en la cúrcuma, proporciona varios de los beneficios para la salud de la planta. Si bien muchas personas han utilizado la cúrcuma como especia para mejorar su alimentación durante los últimos 4000 años, ¡la cúrcuma ha desempeñado un papel importante en la medicina natural! El alivio de la artritis es una gran razón por la cual se toma esta hierba tan antigua.
La boswellia es un suplemento herbal ayurvédico, que también ayuda a reducir el dolor de la artritis. El aceite esencial extraído de esta hierba es el incienso.
Inicialmente, los investigadores midieron la función física del paciente con artritis, la rigidez matutina y los sentimientos generales del paciente asociados con la gravedad de su enfermedad.
Al final del estudio de trimensual, los investigadores averiguaron que la cúrcuma fue significativamente útil en la reducción del dolor relacionado con la artritis.
Además, los investigadores también descubrieron que la combinación de la cúrcuma y la boswellia fue aún más efectiva para reducir el dolor, proporcionando un efecto sinérgico.
De acuerdo con el estudio y para un alivio óptimo de la artritis, deben tomarse ambos suplementos a la vez.
Cúrcuma (curcumina) : tomar 500 mg hasta tres veces al día.
Boswellia: tomar al menos 150 mg hasta tres veces al día.
Bibliografía:
Haroyan A, Mukuchyan V, Mkrtchyan N, et al. Efficacy and safety of curcumin and its combination with boswellic acid in osteoarthritis: a comparative, randomized, double-blind, placebo-controlled study. BMC Complementary and Alternative Medicine. 2018;18:7. doi:10.1186/s12906-017-2062-z.
