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¿Sabía que los productos que llevan la etiqueta "libre de crueldad animal" no son necesariamente veganos? ¿Y que aunque un producto no contenga ingredientes de origen animal, es posible que se haya probado en animales?
Debido a las normativas limitadas y a las etiquetas a veces engañosas, puede resultar confuso explorar todas las opciones cuando uno se convierte en un consumidor consciente. ¡Profundicemos en todo lo que hay que saber sobre lo que hace que un producto sea vegano o "libre de crueldad animal"!
A medida que crece el movimiento vegano, también crece la demanda de productos de belleza veganos. Aunque normalmente se asocia el veganismo con la comida, el veganismo se refiere a un estilo de vida que no incluye ningún producto de origen animal. Los veganos adoptan una postura ética contra la opresión de los animales en apoyo de la liberación animal, y adaptan sus hábitos de vida a este valor.
El uso de animales como ingredientes afecta a industrias que no se limitan a lo que comemos. Así que alguien que ha elegido un estilo de vida vegano es consciente de todas las áreas de consumo, desligándose conscientemente de la opresión animal. Esto incluye la ropa (evitando el cuero, la seda y las pieles), la comida (sin carne, aves, pescado, huevos ni lácteos), los productos de belleza (más adelante se habla de ello) y mucho más.
Muchos productos son veganos por accidente (no se anuncian con una etiqueta vegana) y no contienen ingredientes de origen animal. La mejor manera de asegurarse de que un producto es realmente vegano es leer atentamente la etiqueta de ingredientes. Y permítame decirle que los veganos nos hemos vuelto muy buenos a la hora de inspeccionar los ingredientes de todo lo que compramos, siempre.
Al igual que la leche en polvo se cuela innecesariamente en demasiados productos alimenticios (¿Por qué las papas fritas necesitan leche en polvo? ¡Que tenga sentido!), algunos de estos ingredientes se cuelan en nuestros acondicionadores, lápices labiales, jabones corporales preferidos, y más, con nombres engañosos. Si le interesa hacer la transición a la belleza vegana, tenga cuidado con los siguientes ingredientes de origen animal que se utilizan con frecuencia en los cosméticos.
Este ingrediente está presente en muchos productos labiales y se elabora a partir de lana de oveja. Para obtener el mismo efecto humectante, los productos veganos utilizan aceites vegetales como el aceite de coco y la manteca de karité.
Las abejas fabrican cera de abeja consumiendo miel. Cuando las abejas consumen miel, ésta se convierte en cera que se secreta del abdomen de la abeja y se utiliza para construir el panal donde las abejas crían a sus polluelos y almacenan la miel. Este tipo de cera generalmente está presente en los bálsamos labiales y puede actuar como emulsionante. La cera de soya y la de candelilla son sustitutas. Mantenga suaves y tersos los labios con bálsamos labiales veganos.
Para producir una libra de miel, las abejas deben visitar dos millones de flores, y estas la producen para alimentarse a sí mismas, no a los humanos. Por eso los veganos evitan los productos derivados de las abejas, como la miel y la cera de abejas. La miel se utiliza con frecuencia en cosmética por sus propiedades suavizantes y antibacterianas. La manteca de karité tiene un efecto hidratante y suavizante similar al de la miel, y las propiedades antibacterianas de esta última pueden sustituirse por las del aceite de árbol de té.
La seda procede de los capullos de los gusanos de seda, y para producir un kilo de seda mueren unos 3000 gusanos. La proteína hidrolizada de seda se podría emplear en productos capilares para lograr un efecto acondicionador y liso. Una alternativa prometedora en los productos capilares veganos es la proteína hidrolizada de avena.
Por lo general, el colágeno se elabora a partir de una combinación de piel, huesos y tejidos animales para crear un efecto de relleno o antienvejecimiento en los productos de belleza. Técnicamente, el colágeno vegano no existe y es mejor consumir vitaminas y minerales que potencien el colágeno, como la vitamina C y el zinc.
Este ingrediente que fortalece el cabello y las uñas procede del pelo y los cuernos de los animales. Las proteínas vegetales pueden utilizarse para un fin similar.
La goma laca se fabrica a partir de las secreciones de las cochinillas de la laca, muchas de los cuales mueren en el proceso. Se calcula que se necesitan unas 100.000 cochinillas de la laca para fabricar medio kilo de goma laca. La goma laca podría estar presente en el esmalte de uñas, la máscara de pestañas, el delineador de ojos y la laca para el pelo, ya que se utiliza normalmente como emulsionante. Es posible que los cosméticos veganos utilicen una alternativa a base de maíz, que también es más rentable que su equivalente de origen animal. Con una máscara vegana, podrá lucir unas pestañas seductoras y sin cochinillas de la laca.
La glicerina que contienen los productos cosméticos procede con frecuencia de la grasa animal y actúa como suavizante. Las alternativas de glicerina vegetal utilizan una base como el aceite de coco, soja o aceite de palma (que algunos veganos también deciden no utilizar debido a la deforestación impulsada por la industria del aceite de palma que afecta a los orangutanes, elefantes pigmeos y rinocerontes de Sumatra).
La caseína procede de la leche de vaca y se utiliza para acondicionar. Es importante recordar que las vacas no producen leche porque sean vacas: producen leche porque son madres. Para obtener leche, ya sea para alimentos o productos de belleza, una vaca pasa toda su vida siendo sometida a embarazos forzados y ordeños constantes hasta que queda "agotada", momento en el que es sacrificada para obtener carne de res. Por suerte, ahora tenemos acceso a abundantes alternativas lácteas vegetales que producen productos de belleza de la misma calidad, sin causar daño a las vacas.
El escualeno se obtiene a partir del aceite de hígado de tiburón y se utiliza como ingrediente hidratante y antienvejecimiento en productos para el cuidado de la piel, bases, bálsamos labiales, maquillaje, entre otros. El escualeno vegano se obtiene a partir del germen de trigo y las aceitunas.
El sebo se obtiene del tejido graso de vacas u ovejas y normalmente se emplea en sombras de ojos, bases de maquillaje y lápices de labios. Los efectos acondicionadores y estabilizadores de la piel del sebo pueden sustituirse por parafina o sebo vegetal.
La guanina procede del brillo de las escamas de los peces y se utiliza en cosméticos brillantes como bronceadores e iluminadores. La mica o el rayón son buenas alternativas a la guanina y se puede obtener un brillo sin guanina con iluminadores veganos.
"libre de crueldad animal" significa que el producto y sus ingredientes no se han probado en animales. Por suerte, más de 1000 empresas están certificadas como "libre de crueldad animal". Veamos algunas de las ventajas de comprar productos de belleza "libres de crueldad animal".
Se calcula que 500.000 animales sufren y mueren cada año como consecuencia de las pruebas realizadas en animales en la industria cosmética. Si le gustan los animales, elegir un producto "libre de crueldad animal" es una oportunidad de alinearse con sus valores.
Las pruebas cosméticas en animales comenzaron en 1920 con pruebas de "dosis letal" en roedores y los productos se siguen probando en conejos, cobayas, ratones y ratas. Cuando un producto de belleza se prueba en un animal, la aprobación de ese producto o ingrediente es el resultado de someter a cientos de animales que pasan toda su vida en jaulas a pruebas que pueden ser dolorosas, causar lesiones y provocar la muerte.
La realidad es que las pruebas de productos cosméticos sin animales no solo evitan la crueldad hacia los animales, sino que son más económicas, producen resultados más rápidos y son más eficaces para predecir cómo reaccionarán los seres humanos al producto en el mundo real.
Un ejemplo de pruebas cosméticas sin animales son las pruebas de irritación cutánea en cultivos de piel humana. Con la ayuda de células de piel humana, se puede evitar realizar ensayos en animales y seres humanos.
Dado que existe un largo historial de pruebas con animales, disponemos de amplias investigaciones sobre qué ingredientes son seguros para su uso en los productos. Los productos "libres de crueldad animal" pueden basarse en ingredientes que ya se han considerado seguros para los cosméticos.
Cuando una empresa opta por no utilizar ingredientes probados en animales, suele emplear ingredientes más naturales y vegetales, más suaves y saludables para la piel, en lugar de sustancias químicas como parabenos, sulfatos, colorantes sintéticos y fragancias.
Tal vez se pregunte si hay algún inconveniente a la hora de comprar productos veganos y "libre de crueldad animal". Un posible inconveniente es que estos productos pueden ser más costosos que sus equivalentes no veganos que se han probado en animales. Sin embargo, esto ha comenzado a cambiar y se pueden encontrar productos veganos y "libres de crueldad animal" a precios muy variados, sobre todo si se compran por Internet.
Otra crítica frecuente al término "libre de crueldad animal" es que se refiere simplemente a que no se experimenta en animales. En realidad, las pruebas con animales son sólo un ejemplo del daño que puede producirse en la creación de un producto. Podría pasar por alto por completo las condiciones humanas (prácticas laborales injustas) y el impacto ambiental de ese producto. Si le interesa ser un consumidor más consciente, investigar los productos y las empresas que decide apoyar puede ir mucho más allá de la etiqueta de ingredientes para determinar si usted está alineado éticamente.
Comprar productos "libres de crueldad animal" es una excelente manera de alinearse con su amor por los animales, pero no se deje engañar por el sello del lindo conejito que dice "libre de crueldad animal". No hay que olvidar que los productos "libres de crueldad animal" no son necesariamente veganos. Eso quiere decir que su acondicionador de leche y miel podría estar etiquetado como "libre de crueldad animal" a pesar del daño causado a las vacas y a las abejas para obtener sus ingredientes.
Si compra productos que sean tanto "libre de crueldad animal" como veganos, puede tener lo mejor de ambos mundos. Podrá seguir disfrutando de tratamientos faciales fantásticos, una piel radiante, reflejos resplandecientes, mejillas sonrosadas y un brillo de labios chispeante, y todo sin causar daño a los animales. Busque este sello de aprobación certificado como "libre de crueldad animal y vegano" cuando compre productos de belleza para apoyar los derechos de los animales.
Por Brialle Ringer